7 consejos para evitar el Síndrome del trabajador quemado o “brunout” para mantener una buena rutina de trabajo.

Después de haber estado en una nube mágica donde el agotamiento del día a día parecía prácticamente un sueño lejano y en donde la falta de sueño resultaba ser completamente inimaginable, llega volver a la rutina de trabajo. Deseando así, que llegue el fin de semana para poder descansar.

La vuelta al trabajo no solo implica volver a una rutina laboral, sino que muchas veces pueden aparecer los mismos miedos e inseguridades que pensábamos haber superado durante las vacaciones.

¿Quién no ha sentido alguna vez tener la sensación de llevarse el trabajo a casa, sin poder desconectar y volver “al mundo ideal” del ocio y tiempo libre?

Si actualmente, te sientes agotado tanto física como mentalmente, te encuentras irritado con los demás, estrés prolongado o sientes un gran descenso en tu eficacia laboral y desmotivación, puede ser que estés sufriendo el Síndrome de “burnout" o también conocido como el Síndrome del Trabajador Quemado…

Hoy en  el blog vamos a daros 7 consejos para evitar el famoso Síndrome del trabajador quemado o “burnout” para aprender a desconectar del trabajo y hacerlo más llevadero.

 

7 consejos para evitar el Síndrome del trabajador quemado o “burnout” para mantener una buena rutina de trabajo.

 

1. Identifica que te causa estrés. 

Es muy importante saber identificar cuáles son los motivos qué te causan estrés, para así saber cómo responder ante estas situaciones. Recomendamos, escribir un diario durante varias semanas para poder facilitar saber cuales son los motivos de tu ansiedad.

 

2. Elige una prioridad y establece tus propias metas.

Reflexiona sobre lo que quieres que suceda este año, como por ejemplo cambiar de carrera profesional, ascender, priorizar tu ocio, etc. Para poder así establecer tus propias metas diarias o mensuales, teniendo en cuenta el ritmo que tú necesites para realizarlas.

 

3. Busca tiempo para tus necesidades no laborales.

Para combatir el estrés es muy importante que complazcas tus necesidades físicas (buen horario de sueño, buena alimentación…), sociales y afectivas. Gestiona tus horarios para ver a tus amigos y realizar actividades que te gusten y te motiven.

 

4. Pon tus propios límites y asume el trabajo que puedes abarcar.

Aunque queramos, a veces no podemos abarcar todas las tareas. Hay que aprender a poner límites y decir “no” cuando te pidan hacer algo que exceda tu capacidad o jornada laboral.  Tu ocio y tiempo libre también son tus obligaciones.

 

5. Organiza tu agenda.

Intenta anticiparte a todas aquellas situaciones que pueden generarte altos niveles de frustración y estrés. Organiza tu horario anotando las tareas que tienes que realizar para un plazo determinado, y poder así, distribuir tu trabajo de forma en la que te dé tiempo a todo sin agobiarte a última hora.

 

6. Si realizas teletrabajo, planifica tu jornada y establece unos horarios.

Es importante, mantener una rutina sana de horarios y para ello, planifica tu jornada laboral según tu rendimiento, como si estuvieses en una oficina, incluyendo descansos laborales.

 

7. Relájate y cuídate.

Aprender a gestionar la frustración es una tarea difícil, por eso es importante saber cómo mantener la calma para así controlar aquellas situaciones que nos puedan producir ansiedad. 

Por último, y no menos importante, no te dejes nunca a ti mism@ para más tarde. Cuida mucho tu salud mental y física.