Las heridas emocionales
Origen y consecuencias en la edad adulta
La manera en que los adultos interpretan y perciben el mundo hoy en día se aprende durante su infancia. Estos sucesos ocurren debido a la influencia del ambiente, ya sea por la familia, las experiencias vitales, el contexto cultural, entre otras variables.
No se suele hablar mucho de ello, pero las experiencias vividas durante la infancia conforman en gran parte nuestra personalidad. Es por ello que, probablemente, la gran mayoría de adultos hayan experimentado alguna herida emocional durante la infancia y no se hayan dado cuenta de la importancia de estas hasta llegar a la edad adulta.
Por lo tanto, las heridas emocionales son experiencias dolorosas que afectan profundamente al bienestar psicológico y emocional de una persona. Estas heridas pueden ser causadas por diversos eventos traumáticos o situaciones difíciles durante la infancia, y a menudo tienen un impacto en la edad adulta en cómo una persona se siente, piensa y se comporta.
Cinco tipos de heridas emocionales
1. Herida del abandono:
Esta herida sale a la luz cuando nuestras necesidades afectivas en la infancia no han sido completamente cubiertas por las figuras de referencia, por lo que el infante ha podido experimentar soledad, falta de afecto o desprotección.
Las personas que mantienen esta herida en la edad adulta pueden buscar el afecto que no han tenido en sus parejas, amistades o hijos, teniendo así más probabilidad de desarrollar dependencia emocional. Por otro lado, muestran miedo al abandono utilizando mecanismos de protección para no establecer vínculos fuertes y así evitar ser abandonados.
2. Herida del rechazo:
Esta herida florece cuando las personas se han sentido rechazadas durante su infancia. Puede ser que durante su desarrollo infantil sientan que no han aceptado sus ideas, pensamientos y sentimientos. Este hecho genera la idea de que las personas con una herida emocional de rechazo no son dignas de amar ni ser amadas.
Los adultos que mantienen esta herida emocional tienen dificultades para aceptar críticas y sufren mucho cuando alguien no acepta su idea o propuesta. Además, suelen esforzarse para obtener el reconocimiento y aprobación de los demás.
3. Herida de la humillación:
Esta herida surge cuando se han experimentado muchas críticas durante la infancia, con mensajes con connotaciones negativas relacionadas con la capacidad de hacer las cosas y habilidades. Este hecho acaba generando que la persona sea insegura y dude de sus ideas y pensamientos.
Las personas adultas con esta herida emocional abierta muestran una autoestima frágil y vulnerable. Generalmente dependen de la imagen que los demás tienen sobre ellos de manera constante. Como consecuencia, se muestran complacientes ante las demás personas.
4. Herida de traición:
Esta herida aparece cuando en la infancia se viven experiencias en las cuales las figuras de referencia han engañado al niño o no han cumplido con lo que le prometieron. Este hecho genera, en muchas ocasiones, desconfianza y soledad.
En la actualidad, los adultos que mantienen esta herida suelen tener problemas de confianza con sus relaciones interpersonales, usando mucho el control para que les proporcione seguridad.
5. Herida de la injusticia:
Esta herida nace cuando, durante la infancia, las figuras de referencia han optado por una educación autoritaria hacia el infante, donde se le imponen puntos de vista sin tener en cuenta las necesidades o intereses del niño.
En la edad adulta, esta herida se refleja en la rigidez mental ante opiniones y juicios de valor que expresan como verdades absolutas. Generalmente, suelen tener dificultades para aceptar otros puntos de vista.
Las heridas emocionales pueden tener un impacto duradero en la vida de una persona, pero con el apoyo adecuado y el esfuerzo consciente, es posible sanarlas y vivir una vida más plena y equilibrada.
Compartir
Pide tu cita
Ponemos a vuestra disposición asesoramiento psicológico puntual por vía telefónica, presencial u online. Puedes rellenar el siguiente formulario, el cual es totalmente confidencial i será dirigido a un profesional de nuestro equipo.
C/ Vila i Vilà, 31-33, 08004 - Barcelona Ubicación y horarios