¿Qué es la estimulación cognitiva?

La estimulación cognitiva hace referencia a todas aquellas actividades dirigidas a mantener o mejorar el funcionamiento cognitivo en general, es decir, mejorar la memoria, la percepción, la atención, el lenguaje, la planificación, el razonamiento o las prácticas mediante ejercicios y actividades dirigidas.

Su objetivo principal es trabajar aquellos aspectos cognitivos que suelen verse afectados con el paso de los años, debido al envejecimiento normal, o bien, a los efectos de alguna enfermedad neurodegenerativa, para mantener o mejorar su funcionamiento.

Al ralentizar el proceso de deterioro, se consiguen también otros objetivos, como son evitar la desconexión con el entorno, aumentar la autoestima, mejorar las relaciones sociales, mantener la autonomía personal y, en general, mejorar la calidad de vida.

¿En qué consiste?

En las sesiones de estimulación cognitiva realizamos ejercicios, actividades y juegos para trabajar la memoria, la atención, el lenguaje, la percepción visual, la comprensión lectora o la planificación.

Se trata de llevar a cabo actividades dinámicas y principalmente grupales, que permitan la participación de todos los miembros del grupo.

Consiste en estimular la funcionalidad cognitiva para mantener activa la mente y así ralentizar el proceso de deterioro que se produce de manera normal con el paso de los años.

¿A quién va destinada?

Las sesiones de estimulación cognitiva van dirigidas a todas aquellas personas mayores de 55 años que quieran ejercitar su mente.

También pueden asistir personas con deterioro cognitivo leve debido a algún tipo de demencia o enfermedad neurodegenerativa.

¿Cómo lo trabajamos?

Realizamos sesiones individuales y grupales.

Los grupos son de entre 5 y 8 personas. Se procura que los grupos sean lo más homogéneos posible.

Las sesiones individuales se planifican en función de las necesidades concretas de cada uno y se trabajan también de manera dinámica y personalizada.